miércoles, 26 de agosto de 2020

El papa Francisco y el mar


 

El Papa denuncia la dura situación de los trabajadores del mar

     En el 100º aniversario del Apostolado del Mar/Stella Maris, el "Video del Papa" para el mes de agosto se centra en los marineros, los pescadores y sus familias, cuyas vidas se ven atravesadas por múltiples dificultades y desafíos.
     El Video del Papa de agosto acaba de ser publicado, dando a conocer la intención de oración que el Santo Padre confía a toda la Iglesia Católica a través de la Red Mundial de Oración del Papa que incluye el Movimiento Eucarístico Juvenil - MEJ. En esta ocasión, el Santo Padre se dirige especialmente a “todas las personas que trabajan y viven del mar” y pide que recemos por ellas y sus familias: "La vida del marinero, del pescador y la de sus familias es muy dura", explica Francisco.
Explotación y abuso en la industria del mar
    En los últimos años, varios informes en los medios de comunicación internacionales han revelado las duras condiciones de trabajo que existen en la industria marítima. El libro Fishers and Plunderers – Theft, Slavery and Violence at Sea (2015) reveló, por otro lado, que los pescadores y marineros trabajan en la ocupación más peligrosa del mundo y son particularmente vulnerables a la explotación y el abuso.
    En el peor de los casos, son objeto de trata y viven en condiciones similares a la esclavitud. Sin ir más lejos, la Agencia Europea de Seguridad Marítima declaró en un informe que, entre 2011 y 2020, hubo 745 víctimas fatales de trabajadores del mar y casi 9 mil heridos, entre otras trágicas estadísticas de este sector.
 La preocupación del Papa por los trabajadores
    La preocupación del Papa por los desafíos a los que se enfrentan los trabajadores del mar y sus familias cada día va desde el “abandono en puertos lejanos” y el “trabajo forzado” hasta la “pesca industrial y la contaminación”. A través de imágenes de impacto provistas por la Fundación de Justicia Ambiental (EJF), se pueden ver en el video los desafíos a los que se enfrentan los trabajadores del mar y sus familias cada día. El Santo Padre también enfatiza, en medio de esta alarmante situación, que “sin la gente de mar muchas partes del mundo sufrirían hambre”.
    En efecto, son más de tres mil millones las personas que dependen de la biodiversidad marina y costera para su sustento, sin mencionar que la pesca marina emplea directa o indirectamente más de 200 millones de personas. 
    Por su parte, el padre Frédéric Fornos, sacerdote jesuita y Director Internacional de la Red Mundial de Oración del Papa, explica:
   «Sabemos que las personas que pertenecen al mundo del mar están muy expuestas. Y este año no solo a las adversidades propias que supone el trabajo, sino también a las dificultades que generó la pandemia: la lejanía de la familia por no poder tocar tierra, el miedo al contagio y la incertidumbre laboral por los tiempos que vendrán. Así lo recordó el Papa Francisco en junio, en un videomensaje de agradecimiento y consuelo: "Me gustaría decirles que no están solos y que no están olvidados. Su trabajo en el mar a menudo los mantiene alejados, pero están presentes en mi oración y en mi mente". El Papa nos invita todo el mes de agosto a rezar —esto significa llevar en nuestro corazón y valorar todas las personas que trabajan y viven del mar— por todos sus sacrificios y por su gran contribución ‘a la gran familia humana de alimentos y otros géneros de primera necesidad». Ciudad del Vaticano

miércoles, 5 de agosto de 2020

Mensaje del Papa Francisco a la gente de la mar

 
 
La gente de mar del mundo celebra el apoyo del Papa Francisco en un momento crítico de la crisis por los cambios de tripulación
 
El pasado miércoles, el Papa Francisco publicó un videomensaje rindiendo homenaje a los marinos y los pescadores, y reconociendo las penurias que se están viendo obligados a soportar a raíz de la pandemia del COVID-19.
     Cientos de miles de marinos y pescadores permanecen varados en el mar porque no les conceden permiso para bajar tierra ni se autorizan los cambios de tripulación desde el comienzo de la pandemia del coronavirus. El Papa Francisco se dirigió directamente a ellos y les dijo: “En estos últimos meses, sus vidas y su trabajo han cambiado notablemente; han afrontado y siguen afrontando, muchos sacrificios”. “Largos períodos de alejamiento a bordo de los barcos sin poder bajar a tierra. La lejanía de la familia, los amigos y el propio país, el miedo al contagio, todos estos elementos son una pesada carga de llevar, ahora más que nunca”, añadió el Papa.
    La Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF) aplaude al Papa Francisco por reconocer a los héroes no reconocidos de esta pandemia: los marinos y los pescadores. Estos héroes han seguido transportando el 90 % de las mercancías del mundo, velando por que los bienes esenciales y los suministros médicos lleguen a su destino y pescando y suministrando al mundo productos de mar. A pesar del trabajo vital que la gente de mar y los pescadores están desempeñando durante esta pandemia, algunos Gobiernos no están defendiendo los derechos humanos fundamentales de estos trabajadores esenciales, en particular su derecho a regresar a casa al finalizar sus contratos, ya que algunos marinos llevan varados en el mar hasta 15 meses. Como los países cerraron sus fronteras resulta imposible realizar los cambios de tripulación en los buques, un problema que se ha convertido en una crisis humanitaria.
       La desesperación de estos tripulantes fatigados y abandonados cada vez es mayor. La ITF recibe un número creciente de mensajes de personas que trabajan en el mar. Estos mensajes están llenos de desesperación, frustración y creciente desesperanza, debido a la interminable incertidumbre en la que están sumidos. “Las alabanzas y las oraciones del Papa Francisco por los marinos y pescadores afectados por las consecuencias de esta pandemia siguen ilustrando la gravedad de la situación que padecen estos trabajadores y trabajadoras. La ITF, junto con nuestros aliados de la sociedad civil y de la industria, renovamos nuestro llamado a los Gobiernos para que den un paso al frente y contribuyan a facilitar los cambios de tripulación.
     Los Estados de abanderamiento no han asumido su responsabilidad de proteger los derechos humanos de la gente de mar”, afirma el presidente de la ITF, Paddy Crumlin. “Los Gobiernos han incumplido hasta ahora su responsabilidad de defender los derechos humanos; consecuencia de ello es la miseria humana que estamos viendo en todos los océanos del mundo. Muchos marinos tienen fe y están esperando que los Gobiernos, incluido el suyo propio, demuestren liderazgo, abran sus fronteras y se muestren compasivos en estos tiempos de crisis”.  "Los Gobiernos tienen ahora la oportunidad de prestar atención al mensaje del Pontífice y ofrecer a la gente de mar las dispensas de visado y viaje que necesitan para abandonar el barco en el que trabajan y ser sustituidos por una nueva tripulación”, explicó Crumlin.
       El mensaje del Papa Francisco aparece después de la primera cumbre de líderes sindicales del transporte, fabricantes y empleadores, celebrada en el Vaticano en marzo de 2019, organizada por el canciller de la Academia Pontificia de las Ciencias. “El año pasado, la ITF se comprometió a mantener un diálogo permanente entre nosotros, la Iglesia Católica y las organizaciones religiosas y, lo que es más importante, establecimos una visión compartida para promover los derechos humanos y sindicales y afrontar algunos de los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad contemporánea, como la promoción de la justicia social, económica y medioambiental. Esperamos con interés la oportunidad de continuar esta importante iniciativa”, dijo Crumlin.
     “La actual pandemia de coronavirus nos permite ver el alcance de los desafíos que enfrentamos, en particular los emanados de esta crisis que podrían exacerbar las desigualdades actuales, sobre todo para las mujeres y quienes trabajan en la economía informal. Esto refuerza la necesidad permanente de diálogo y cooperación entre los sindicatos y la Iglesia, con el fin de proteger los empleos, poner fin a la explotación y salvaguardar los derechos sindicales”, concluyó Crumlin. 30 Jul 2020